Textil 
enero 26, 2015

Las microempresas santandereanas de producción de calzado guardan muchas similitudes con las mexicanas y españolas.
Hay una gran proporción de ilegalidad, sus procesos son aún tradicionales así como sus canales de comercialización. Y también uno de sus principales contrincantes es la avalancha de calzado chino que ilegal o legal está llegando a los países con precios irrisorios que han puesto a tambalear el sector.
Pues bien, lo cierto es que con sectores con más trayectoria enfrentando este libre comercio, tanto las micro mexicanas como españolas están aplicando modelos empresariales y reorientando su producción a mercados exclusivos, con alto valor agregado, encontrando nichos de mercado específicos con altos posicionamientos de marcas.
Entre los procesos que compartieron expertos en la materia de ambos países con empresarios santandereanos está el de ‘Ingeniería Concurrente’, que pretende trabajar con un equipo multidisciplinario para desarrollar los productos, especialmente colecciones de calzado en el menor tiempo posible.
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“La primera clave es la diferenciación, ¿qué nos hace más innovadores? La segunda es el tiempo de desarrollo al mercado. No solamente hay que reducir costos sino el tiempo de lanzamiento al mercado. Entre el 60% y el 80% de los costos se centran en la fase de diseño, por lo que hay que optimizarlo”. Hay que optimizar los procesos de producción y desarrollo”, aseguró el especialista en ingeniería y procesos de fabricación, David Juárez Varón.
El experto agregó que, “en España nosotros ya pasamos por esa mirada cortoplacista de cómo hacer las cosas. La segunda fase fue importar el producto que es más barato que producirlo y ahora estamos en una tercera fase que es volver a producir, pero nos quedamos con el valor añadido que es el diseño, que nos permita subir las tarifas”, indicó.
Con la aplicación de este modelo, las microempresas españolas han reducido los plazos en 30% y los costos y el margen se han incrementado.
Para el caso de México las empresas del sector desarrollaron el programa de gestión integral ‘Mexican Shoes Quality’, creando la Cámara de la Industria del Calzado de Guanajuato.
El modelo según el experto en dicha materia, Marco Antonio Romero, se ha aplicado a más de 150 empresas de México reduciendo la informalidad y está en fase de implementación en 20 empresas del país, incluyendo a cuatro de Bucaramanga que buscan certificar sus procesos.
Fuente: http://bit.ly/16iSUOE

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